Las aplicaciones de monitoreo ayudan a los padres a mantener seguros a sus hijos y les impiden hacer algo mal. Con la creciente presencia y disponibilidad de Internet, los adolescentes están obteniendo mucho acceso a él y se les encuentra enviando muchos mensajes de texto. Incluso para los niños más pequeños, los padres a menudo les dan sus tabletas o teléfonos para que pasen el tiempo y les brinden entretenimiento disponible.
Debido a estos factores, la aplicación de control parental durante el tiempo de pantalla es esencial. Estos suelen ser siempre parte de las aplicaciones de control parental, por ejemplo, el Servicio de Control Parental. Esto les permite a los padres monitorear las actividades de sus hijos y controlar sus tiempos de pantalla también.
Junto con los tiempos de pantalla, hay varias otras cosas que los padres deben controlar. Algunos de estos incluyen fotos, mensajes de texto, aplicaciones descargadas, uso de Internet y mensajes de redes sociales. También es indispensable hablar con sus hijos antes de instalar cualquier software de monitoreo en sus teléfonos, ya que generan confianza.
Mirar fijamente una pantalla durante períodos prolongados es muy perjudicial para todos, adultos y niños por igual. La salud física, así como la mental, es importante y no se debe descartar. Los padres deben preocuparse por la cantidad de tiempo que su hijo pasa frente a una pantalla.
Es donde entran en juego las aplicaciones de seguimiento de tiempo y ubicación de pantalla. Estos ayudan a los padres a monitorear eficientemente a sus hijos y también a limitar sus tiempos de pantalla. La Organización Mundial de la Salud (OMS), a partir de 2019, lanzó un nuevo conjunto de recomendaciones sobre la cantidad de tiempo que debería pasar frente a una pantalla y la cantidad de actividad física que debería estar recibiendo. Se trataba particularmente de niños de cinco años o menos. Los niños que yacen en este grupo de edad solo deben tener una hora de pantalla cada día.
Los padres siempre deben optar por aquellas aplicaciones que tienen control parental para Android. Estas son las plataformas más comunes y deben ser compatibles con cualquier software. Además, las aplicaciones de control parental deberían dar a los padres la flexibilidad de restringir aplicaciones particulares que no desean que sus hijos usen.
También deben darles acceso para ver los mensajes de texto de sus hijos, tanto entrantes como salientes. La aplicación también debe admitir la función de ver capturas de pantalla. Contienen información privada que probablemente no debería compartirse ni guardarse.
Finalmente, los padres también deberían poder ver transmisiones de fotos y mensajes de redes sociales en los teléfonos de sus hijos. Ayuda a protegerlos del ciberacoso y también evita que se comporten mal. Las aplicaciones de monitoreo deben ofrecer estas características para ayudar a los padres a mantener a sus hijos seguros en línea.